El término “peeling” procede del verbo inglés TO PEEL, una de cuyas acepciones es “pelar”. En Medicina Estética sirve para definir el proceso según el cual un estímulo de cualquier etiología, ya sea físico o químico, de origen natural o artificial, es aplicado sobre la piel con el objetivo de provocar un decapado más o menos intenso o profundo de la epidermis.
El peeling o exfoliación es un acto médico mediante el cual se busca eliminar capas de la epidermis a mayor o menor profundidad en función del o de los agentes exfoliantes utilizados. Los agentes mejor estudiados por su simplicidad de aplicación son los de origen químico, también llamados EXFOLIANTES, los cuales, por su naturaleza química se les podría englobar entre los medicamentos pero por su mecanismo de acción casi se les podría incluir en el grupo de los fisioterápicos.
El peeling químico consiste, pues, en la aplicación sobre la piel de una o más sustancias químicas que provocan una destrucción controlada de los estratos epidérmicos con la consecuente descamación debida a la aceleración del recambio celular, y la posterior regeneración epidérmica, así como de la reparación de la dermis con la formación de nuevo colágeno. A veces, la descamación es muy evidente y debe ser tenida en cuenta a la hora de elegir un tipo u otro de agente exfoliante ya que puede verse alterada en mayor o menor medida la vida social o laboral del paciente. Otros peelings son absolutamente “discretos” y no alteran para nada los hábitos de los pacientes.
En nuestro arsenal terapéutico disponemos de distintos tipos de peelings, tanto mecánicos como químicos, que nos permiten optimizar el resultado con el menor trastorno o inconveniente para el paciente. Las mejores indicaciones de los peelings son el fotoenvejecimiento cutáneo, el acné, el melasma o manchas faciales, ladermatitis seborreica y todas aquellas situaciones que requieran un incremento del recambio celular. La combinación del uso de peelings con otras técnicas como los implantes faciales, la mesoterapia rejuvenecedora, la toxina botulínica o las terapias de cabina estética contribuye al mantenimiento de los resultados obtenidos.
Jetpeel®
Es un moderno equipo de nos permite hacer un tipo particular de peeling o limpieza en profundidad de las capas epidérmicas superficiales. De la misma manera que las barredoras industriales, este equipo emplea suero fisiológico a presión para eliminar las células muertas de la superficie cutánea sin ningún tipo de molestia; por el contrario, deja una agradable sensación de frescor y suavidad después de su uso.
Lo utilizamos de forma sistemática antes de cualquiera de los tratamientos faciales que manejamos, ya sean peelings químicos, implantes, mesoterapia facial, aplicación de toxina botulínica, etc. También es muy útil como complemento de nuestros tratamientos de estrías o cicatrices.